Microcuento #13: El Bosque Perdido



Podría seguirte a todos lados, perdiéndome aquí por días y siglos enteros. Te buscaría cortando el aire, acompañando el tibio cantar de los pájaros, bajo todas las hojas de estos vetustos árboles; te buscaría donde las paredes hacen ecos, en el fondo de aquellas pozas donde se reúne el agua, tras esos troncos donde aún juegan los niños fantasmas.
            Te sigo, te busco, te encuentro.
            Siguiendo esa melodía que resuena en mi pecho, marcando el tempo exacto de mis latidos, bajo mis botas, detrás de todas esas telas de araña repletas de secretos, te sigo como nunca antes lo había hecho; y es que te extraño, con tu dulce aroma a bosque, con tu alma de tranquilo río, con tu cariño y fragilidad de inocente sonido.