Microcuento #28: Llamada nocturna



−¿Aló, operador?
            −Sí, señor, buenas noches, diga.
            −Necesito llamar urgentemente a mi esposa.
            −¿Qué le ha pasado, señor? ¿Se encuentra bien, está usted en un lugar a salvo?
            −Me he extraviado. No sé dónde estoy. Todo está oscuro y acá no parece haber nadie más que yo y este teléfono público del que llamo.
            −Suena mal… A ver, señor, ¿puede darme su nombre, por favor?
            −Marcelo Araneda Troncoso.
            −¿Marcelo Araneda Troncoso? Pero… ¿no es usted el hombre asesinado que apareció en los titulares hoy día? Aló, señor…, no le escucho bien…
            −Acá está oscuro…, y me siento solo, muy solo… Por favor…, tengo frío… Llame a mi esposa y dígale que…
            −¡¿Aló, aló, señor?!
            −…que en el Infierno todo está oscuro.