¿Recuerdan
la historia "La punta del viento"?; si la respuesta es afirmativa,
quizá esto le interese: resulta que La Punta del Viento de verdad
existe: es un mirador con una excelente vista panorámica hacia toda La
Serena donde cualquier persona podía ir y sentarse a ver cómodamente el
aterdecer sin ser molestado por nadie; y digo podía, tiempo pasado,
porque ahora, gracias a la habilidad para arruinar
fiestas que tienen ciertas personas autoritarias o con poder, el metro
cuadrado en que consistía el mirador ha sido cerrado con rejas, trampas
fabricadas con tecología rusa y otros explosivos aún más dañinos que los
que mataron a Leonel. Triste, pero cierto: de a poco se van cerrando
los espacios libres, los árboles de los parques van siendo talados sin
consideración y todo lo verde se va transformando rápidamente en gris y
opaco.
¿Qué hacemos entonces? ¿Nos rendimos y dejamos las cosas como éstan, o derribamos las rejas para seguir viendo más atardeceres en nuestra querida Punta del Viento?; porque en un principio es un simple mirador, pero no nos daremos ni cuenta cuando ya los ricos lo dominen todo, hasta el aire que creemos puro y que pronto cobrarán por utilizar.
¿Qué hacemos entonces? ¿Nos rendimos y dejamos las cosas como éstan, o derribamos las rejas para seguir viendo más atardeceres en nuestra querida Punta del Viento?; porque en un principio es un simple mirador, pero no nos daremos ni cuenta cuando ya los ricos lo dominen todo, hasta el aire que creemos puro y que pronto cobrarán por utilizar.