Cuento #17: El mensaje de la tapa del yogurt



Siempre que volvía de la universidad, Pamela abría un yogurt del refrigerador y encendía el computador de su cuarto antes que cualquier otra cosa; entonces esperaba que su lenta sesión empezara mientras lengüeteaba la tapita del yogurt con ganas, contando los sabidos cuarenta segundos que demoraba en funcionar todo. No fue hasta que la chica dejó la tapita a un lado que reparó en el extraño mensaje que traía ésta.
−¿andorius.banroi? −leyó la chica, sin entender absolutamente nada. Pensó que podía haber sido un error de fábrica, o algo así; a veces sucedía, no había de qué preocuparse. Pero para cuando le iba a sacar una foto con su celular para compartir el error con los demás por Facebook, tuvo un extraño chispazo. ¿Y si la frase era el link de una página de Internet?
Pamela abrió entonces su navegador y no demoró en escribir el mensaje de la tapita en él; apenas apretó el botón Enter para accionar la cadena, la pantalla se oscureció de inmediato y comenzó a cargarse una extraña animación en ella…; tuvieron que pasar cerca de seis segundos para que recién se diera cuenta de que ésta era la cara de Felipe Camiroaga, abriendo y cerrando su boca animada como la de Saddam Hussein en South Park.
−¿Qué mierda…? −murmuró la chica, sin saber qué hacer. De seguro era un virus que le iba a destrozar el computador, borrando todas sus fotos, su música y sus trabajos de la universidad. Trató de apagar la CPU utilizando el botón de Encendido, pero no sucedió absolutamente nada.
Fue en eso que iba a apretarlo por segunda vez, que de la boca de Felipe Camiroaga comenzó a salir un montón de texto amarillo que a primera instancia era imposible de entender, acumulándose en la parte posterior de la pantalla.
Pamela aguzó su vista y empezó a leer lo que parecían ser distintos secretos de Estado.
La droga ingresa al país gracias al Ministro de…
La presidenta recibe millones por dejar que las empresas extranjeras…
Las mineras envenenan a la población para…
Los aviones condensadores nos enferman para poder…
La información salía disparada a raudales, cada vez más extensa, cada vez más comprometedora. Era como…
−…como Wikileaks… −farfulló la muchacha inconscientemente, con la boca totalmente desencajada. A medida que iba leyendo, iba entendiendo mejor la razón de las cosas extrañas que sucedían a menudo en el país; todo parecía tener un sentido macro, casi universal.
La activación de los volcanes es parte de un proyecto militar de…
La sequía es una excusa para traer más extranjeros a…
La chica, sin poder controlar los temblores de su cuerpo, tomó su celular sin perder de vista la pantalla y buscó en el marcado rápido el número de su mejor amiga; debía contarle cuanto antes sobre su hallazgo; todos debían saberlo; ¡debía hacerlo público!
Sin embargo, Pamela estaba tan paralizada esperando que su amiga contestara, que no reparó en que tres vehículos militares se estacionaban violentamente afuera de su casa; mucho menos se percató que de todos ellos salían sendos grupos de soldados armados, dispuestos a reducir cualquier amenaza para el país y sus secretos.
Las balas y el fuego, como siempre, acabaron con la única posibilidad de hacer libre a la gente.